Módulo 2 - lección 8
Qué es la psicología transpersonal
Tomando distancia de los conceptos materialistas que expusimos en la lección anterior, la psicología trascendental estudia las experiencias de tipo místico o extra-sensorial que no pueden tener explicación científica. Transpersonal significa que va más allá de lo personal. Es decir que el ser humano no solo ha de identificarse con su personalidad, sino que puede identificarse con un nivel de conciencia mayor. Se considera que el desarrollo humano queda incompleto si no atiende las dimensiones más elevadas o espirituales del ser.
Experiencias místicas
Dentro de las experiencias místicas podemos entender desde experiencias cumbre (término acuñado por el Psic. Abraham Maslow), momentos en la vida de una persona en que alcanza un estado de plenitud, de entendimiento o de comunión con la vida. O bien las experiencias de arrobamiento religioso que han llegado a experimentar los beatos y santos, muchas veces similares al arrobamiento amoroso como lo describe San Juan de la Cruz en su poema Noche Oscura del Alma:
En la noche dichosa,
en secreto, que nadie me veía,
ni yo miraba cosa,
sin otra luz y guía
sino la que en el corazón ardía.
Aquésta me guiaba
más cierto que la luz de mediodía,
adonde me esperaba
quien yo bien me sabía,
en parte donde nadie parecía.
¡Oh noche que guiaste!
¡oh noche amable más que el alborada!
¡oh noche que juntaste
Amado con amada,
amada en el Amado transformada!
Y qué decir de la máxima experiencia transpersonal que es la iluminación, con diversos nombres en distintas culturas: Samadhi, Satori, Nirvana…
Las experiencias místicas, como vemos pueden ser simples momentos de plenitud, o de revelación del propósito (epifanía) o incluso tener percepciones visuales, auditivas que no suceden en la realidad (alucinaciones), como las experiencias que han tendio varios místicos y santos. En todo caso son experiencias profundamente transformadoras. Marcan un antes y un después en la vida de quienes las experimentan: el sentido de la vida y la relación con todos los seres cambia en forma profunda. Se tiene la sensación de que el universo y la vida tienen un propósito ya que una conciencia amorosa es la base de toda la creación. Se llega a percibir, de alguna forma, que el universo mismo no está formado de materia hueca, sino de conciencia omnipresente.
Carl Gustav Jung
Un poco de historia
Poco tiempo después de que Freud expusiera sus nuevas teorías, a través de una amplia colección de obras, dos de sus alumnos más destacados se separaron de su línea de pensamiento. Uno de ellos Alfred Adler se enfocó en la necesidad de pertenencia que tiene el ser humano, como eje de sus investigaciones.
Mientras que el psicólogo suizo Carl Gustav Jung se interesó en forma particular por las similitudes entre los símbolos y ritos de todas las culturas ancestrales. El estudio de los mitos y tradiciones antiguas, así como su práctica clínica lo llevaron a desarrollar nuevos términos como el anima-animus, para describir la parte femenina y masculina de todo ser humano; o el concepto de inconsciente colectivo. Este último término para designar una serie de conceptos o modelos que yacen en lo profundo de todo ser humano, sin importar su raza, geografía o nivel cultual, lo que él llamó los arquetipos. El héroe, la doncella, el sabio, el villano (antagonista) son algunos de los personajes o arquetipos que aparecen continuamente en las leyendas y mitos. Los conceptos de Jung sugieren que la psique humana no se limita a un ámbito individual, sino que de alguna forma, existe una parte de la psique que es colectiva, que trasciende la individualidad.
Pudieramos considerar a Carl Justav Jung como el primer psicólogo transpersonal, pero ya antes William James había empleado el término en una serie de conferencias que dictó en Edimburgo sobre el tema “Las variedades de la experiencia religiosa” (1901-1902). Mientras que el médico canadiense Richard M. Bucke, a raíz de una experiencia mística que experimentó en forma personal, se dio a la tarea de escribir el libro “Conciencia Cósmica, un estudio de la evolución de la mente humana”. Libro publicado en 1901, un año antes de su muerte accidental; en el cual describe experiencias similares vividas por personajes contemporáneos como Walt Witman, o históricos, como Jesús o Buda.
En pleno siglo XX podemos citar a Roberto Assagioli quien puede ser considerado con una mente superdotada ya que a los 18 años hablaba 8 idiomas. Se le reconoce como el fundador la la Psicosíntesis, una escuela psicológica que concibe a la psique formada por distintas subpersonalidades que se reúnen en torno a un centro, el trabajo consiste en armonizar todas estas entidades para un fin creativo. Aparte de su trabajo como psicólogo, Assagioli se interesó por las filosofías orientales, la Yoga, la meditación. Fue amigo cercano de Alice Bailey y perteneció a la Sociedad Teosófica. Sin embargo, procuraba mantener una distancia entre sus intereses espirituales de su trabajo como psicólogo.
La psicología transpersonal, muchas veces es referida como la cuarta fuerza. El psicoanálisis de Freud como la primera fuerza, la psicología conductual: la segunda; la psicología humanista: la tercera y la psicología transpersonal: la cuarta. En realidad, la psicología transpersonal se consolida como escuela en la década de los 60, teniendo como principales expositores a Abraham Maslow, Stanislav Grof, Antony Sutich y Miles Vich.
Experiencias Transpersonales
Son experiencias que no se pueden explicar mediante el modelo mecanicista de la conciencia. En este tipo de experiencias el individuo es capaz de percibir la realidad, trascendiendo los sentidos y el cuerpo ordinario. La clarividencia o la capacidad de ver el futuro están dentro de esta clasificación. Pero igualmente podemos citar las experiencias extrasensoriales, como las que ocurren en las experiencias cercanas a la muerte o en los viajes astrales.
Uno de los más grandes experimentadores en este campo es el Dr. (médico-psiquiatra) Stanislav Groff quien experimentó primeramente con la droga LSD, y una vez que fue prohibida, continuó sus investigaciones usando la Respiración Holotrópica. Mediante esta técnica de hiper-ventilación la persona alcanza estado de conciencia alterados que lo pueden llevar a tipos de percepción velados al estado de conciencia habitual. Sus estudios se han centrado en las experiencias en torno a la gestación y el nacimiento, y cómo es que estos momentos cruciales marcan la psique a lo largo de la vida. Dentro de muchas de sus obras, tal vez la más representativa sea: Más allá del cerebro: nacimiento, muerte y trascendencia en psicoterapia (1985).
Ken Wilber
A la fecha, la lista de psicólogos transpersonales es bastante larga y el exponer aunque sea en forma superficial cada uno de ellos escapa el alcance de esta breve lección. Sin embargo, no pudiéramos dar por terminado el tema sin antes mencionar a Ken Wilber. Su trabajo es destacado, sobre todo porque propone un esquema que nos permita ubicar los distintos niveles de la naturaleza humana, y dentro de cada uno de estos niveles podemos aplicar un modelo diferente. Wilber es quien acuña los términos prepersonal, personal y transpersonal para designar tres etapas claramente definidas del desarrollo de la conciencia. En las últimas décadas Wilber ha criticado el curso que ha tomado la psicología transpersonal por estar en desacuerdo con algunos enfoques que ha tomado esta rama de la psicología.
En todo caso Wilber busca un enfoque integrador, que no se limita únicamente a la psicología, sino que incluye a la filosofía, la religión, el arte y la moral; en resumen, llegar a unificar ciencia y religión.
Las experiencias y conceptos que maneja la psicología transpersonal muchas veces la llevan al terreno de la religión y la espiritualidad, por lo mismo muchos la han criticado por su vaguedad de conceptos o falta de sistematización. Mientras, por otra parte, destacadas universidades alrededor del mundo ofrecen licenciaturas y postgrados en esta materia.
Para comentar en grupo: